Seguro estás pensando: “éste debe ser otro de esos nuevos conceptos que suenan guay pero no dicen nada de nada…”
Te guste o no, el Karma rige tu vida: si haces el bien, recibirás el bien y si das cosas malas, las cosas malas vendrán corriendo a abrazarte de vuelta. Puede que el Karma tarde en pasarte factura, pero siempre lo hará. Y si no, que levante la mano el que se haya librado…
En publicidad la cosa funciona igual: si inviertes pasta, ganarás pasta, si das amor, recibirás amor; pero si la gente te importa un pepino, ¡tú le importarás un pepino a la gente!
Porque amigo, en la publicidad como en la vida, todo vuelve. Easy, no?
Y si de algo tienes que estar seguro es esto te va a pasar ya porque las Redes Sociales son INMEDIATAS. Una mala acción puede hacer que tu comunidad pase del amor al odio en un instante y cuenta con que el Dios de los Dioses aka Google, ni olvida ni perdona.
Así que tú eliges: pensar bien qué haces en Social Media y que Google sea un colega que siempre habla bien de ti, o hacer cualquier cosa, cagarla y conseguir que se convierta en ese cabrón implacable, que todo lo sabe y todo lo recuerda, siempre dispuesto a enseñar tus trapos sucios.
Esto es lo que hay, así que It´s up to you, my darling!